Una mala tarde la tiene cualquiera. En el argot taurino es una expresión para cuando a una figura del toreo no le ha ido bien la corrida. Es una frase que extendida al habla coloquial nos indica que esa persona no ha estado acertada.
La honradez, la decencia o la honestidad son valores que Maillo tiene de sobra. Figura política ejemplar para cualquier persona que abandere tales principios, o sea, si Maillo no existiera, habría que inventarlo o mejor dicho, si gobernaran más Maillo, el mundo sería mejor.
Sin embargo, las siglas le han nublado. Sus declaraciones hacia la gestión municipal en esta localidad, evidencian solo una realidad: Maillo no sabe ni donde está El Dorado. El desconocimiento, unido a la defensa a ultranza a unas siglas le han nublado la visión y la perspectiva política. Maillo se ha tirado a la piscina, pero no había ni salvavidas ni socorrista y el agua… ni estaba ni se la esperaba. Cegado ante sus siglas ha defendido y querido blanquear la MAYOR PARÁLISIS INSTITUCIONAL de la historia democrática de este pueblo. Con la policía local, los comerciantes, los funcionarios, los cofrades o las asociaciones deportivas en pie de guerra ante la nula gestión municipal.
Estoy seguro que Maillo no ha visitado el pabellón inaugurado por la alcaldesa, ni ha podido pasear por las calles más limpias de nuestra localidad ( no hay ni una en buen estado) y como buen “turista” estoy convencido que se habrá pasado por la Oficina de Turismo para que le indiquen lo fabuloso que es nuestro pueblo (nótese la ironía, no por lo fabuloso, sino por una Oficina cerrada).
Maillo tu figura es demasiado inmaculada como para embarrarte defendiendo lo indefendible. Como buen docente sabrás que hay que ir a clases y estudiar antes de ir al examen, porque si no lo haces, el examen lo suspendes. Este municipio está en la UVI y, de momento, no encontramos doctor(a) que lo pueda subir ni a planta.
Lo dicho, no te preocupes, que una mala tarde la tiene cualquiera. Salud y república, compañero.